Internacional, Saturday 24 de June de 2017

Basado en un VM 6×4, permite eliminar la pérdida de productividad en la cosecha de caña de azúcar cuando el propio camión pisotea los brotes en la recolección.

El Volvo VM Autónomo, el primero en su tipo presentado en América Latina, fue diseñado para eliminar la pérdida de productividad causada por el propio camión cuando pisotea los brotes de caña durante la cosecha. Las pérdidas generadas por diferentes causas rondan en un 12% de la producción anual de caña de azúcar. Con el desarrollo de este camión autónomo, se logra reducir un 4% de esas pérdidas.

Volvo es reconocido mundialmente por sus soluciones de transporte innovadoras y con este lanzamiento revoluciona el transporte en la industria agropecuaria, una de las más competitivas del mundo. “Una vez más hemos mostrado el poder de innovación y liderazgo en tecnología presente en el ADN de Volvo”, comentó Wilson Lirmann, presidente del Grupo Volvo América Latina.

“Es un sistema muy avanzado, desarrollado a partir de tecnologías ya disponibles comercialmente en el Grupo Volvo, para aumentar la eficiencia de la operación de transbordo de caña”, declaró Gilberto Ribas, vicepresidente de ingeniería del Grupo Volvo América Latina.

La cosecha de la caña de azúcar se produce en un corto período de tiempo y el trabajo debe hacerse 24 horas al día, siete días a la semana. Debido a la severidad propia de la operación en sí, de la poca visibilidad nocturna y de la paja que cae sobre el suelo, el conductor no logra conducir el vehículo con precisión como para evitar el pisoteo de los brotes. Y como la replantación de caña de azúcar se hace cada cinco años, con un promedio de cinco cosechas por siembra, la precisión en la trayectoria del camión por la plantación es muy importante, ya que los brotes resultantes de la cosecha se convertirán otra vez en plantas adultas de caña de azúcar en zafras posteriores.

La nueva tecnología del camión autónomo de Volvo elimina las pérdidas por el pisoteo de las brotes de la plantación durante la cosecha de caña de azúcar. La operación de transbordo es responsable del 4% de la reducción de productividad por área de un año para otro. El camión funciona autónomamente por los cultivos con una precisión de 2,5 centímetros en la dirección, algo que no podría ser logrado por el conductor, eliminando esa pérdida y por lo tanto aumentando la rentabilidad en la operación.

Después que el mapa digital del cañaveral es insertado en la computadora de a bordo del VM Autónomo, la solución de Volvo reconoce precisamente las líneas de la plantación, sin pasar por arriba de los brotes. El papel del conductor es dirigir el vehículo hasta el comienzo de la línea en el cultivo, encontrar la ruta a seguir y luego retirarlo de la plantación para hacer el transbordo a los vehículos de transporte que llegarán la carga hasta el ingenio azucarero.

El nuevo camión autónomo de Volvo, un VM 6×4, con neumáticos de alta flotación, fue desarrollado en poco más de un año por los ingenieros de Volvo en el complejo industrial de la empresa en Curitiba, Paraná, en colaboración con especialistas de la marca en Suecia y probado con gran éxito en las cosechas de la Usina Santa Terezinha, una de las empresas del Grupo Usaçucar, que está entre los mayores productores y exportadores de azúcar de Brasil, con base en Maringá, Paraná.

El sistema consta de dos antenas GPS de alta precisión (GNSS/RTK), parte del sistema VDS (Volvo Dynamic Steering, el revolucionario sistema de giro de la marca), dos giróscopos de alta sensibilidad y una pantalla colocada dentro de la cabina del camión, que trabaja como una interfaz humano-máquina. Además del sistema de dirección dinámica de Volvo Trucks, el nuevo vehículo ha asimilado, por ejemplo, el Co-Pilot de Volvo Construction Equipment y también dispositivos de Volvo Penta y de Volvo Buses para el posicionamiento del camión en los mapas y para la integración en la arquitectura electrónica del vehículo.