Goya, Wednesday 22 de November de 2017

Habría una lista con más prestadores que tienen en su poder documentos de pago emitidos por la gestión municipal del presidente del PJ correntino. Sin certezas, el equipo de Osella continúa sin recibir información económica oficial.   

La situación de Goya es preocupante. A los allanamientos realizados a las áreas contables de la Comuna por la justicia provincial, por un cheque diferido a cobrar en mayo de 2018, emitido por la gestión del intendente Gerardo Bassi, se suma ahora una larga lista de proveedores que tienen en su poder papeletas del mismo tenor a cobrar en junio.
A quienes les entregaron distintos productos al intendente kirchnerista y el presidente del Partido Justicialista (PJ) local la desesperación comenzó a invadirlos, teniendo en cuenta que la maniobra pensada y perpetrada por los Bassi (Gerardo y su hijo Marcos) representa comprometer el patrimonio municipal a futuro.   
La gestión de los peronistas puede graficarse como un cardumen de pirañas, pasando por un balneario lleno de bañistas, nada más que en este caso, en vez de morder a quienes estaban en las aguas, se hicieron un festival con los dineros públicos de los goyanos.
Son los propios proveedores que recibieron esos cheques quienes le pasaron la información al equipo de Bassi respecto de la manera en que ellos le estaban minando el camino al intendente electo, Ignacio Osella, de cara a su desembarco en el Ejecutivo municipal.
El diálogo continúa cortado. No hay voluntad por parte del kirchnerismo goyano de blanquear la manera en manejaron la administración municipal ni cuál es la situación financiera en que dejan la Comuna. Desde el equipo de Osella se había presentado una nota con 10 puntos que necesitaban conocer para ir previendo la política económica a desarrollar cuando asuman y de esa manera garantizar sueldos y aguinaldo de los trabajadores de la Comuna. Pero para los Bassi nada de esto importa, porque el 10 de diciembre dejará de ser su problema. Marcos Bassi asumirá como diputado provincial y el resto de los integrantes del gabinete ya negocian lugares en el Municipio de Santa Lucía, Lavalle y Paso de los Libres, lugares en los que ganó el peronismo kirchnerista.
Algunos puntos sobresalientes de ese documento solicitando información económica entregado por Osella  tiene relación con el destino del fondo sojero, la deuda flotante que tiene el Municipio, a cuánto ascienden las acreencias de los proveedores, la plantilla de personal y obviamente los cheques diferidos.
No hubo una sola respuesta al respecto. Los Bassi y su equipo han entrado en una suerte de silencio de ultratumba, con intenciones de buscar emprolijar de la mejor manera todas las sospechas que hay de que se habrían hecho grandes negocios durante los últimos cuatro años.
El jefe comunal kirchnerista se halla procesado y debería haber sido suspendido luego de que se le ratificara el procesamiento por haber hecho pagos indebidos y con sobreprecios al Ejército Argentino en épocas de crisis hídricas por trabajos y alimentos. La denuncia fue radicada por el ciudadano goyano y exlegislador nacional José María  Díaz Colodrero.

Sin explicaciones

La gestión de los Bassi se caracterizó por no dar explicaciones. Desde el bloque opositor se cansaron de presentar pedidos de informe que nunca fueron contestados, sobre todo aquellos que tenían que ver con cuestiones del manejo de los fondos públicos.
Quizá uno de los más trascendentes es el que pedía precisiones sobre los 220 millones de pesos que llegaron desde el Gobierno nacional para instalación de luminarias y que jamás fueron rendidos. La manera en que se gastó ese dinero solo lo saben Gerardo y Marcos, quienes manejaron las finanzas municipales como si fueran propias. En ese sentido, también hay un Centro para las Adicciones, para el cual la administración de Cristina Fernández de Kirchner habría girado millones de pesos y que el mismo quedó a medias sin terminarse, más allá de que se habrían certificado las obras como finalizadas.  Con esta incertidumbre, los goyanos caminan hacia una nueva gestión, luego del abandono al que fueron sometidos desde el día de las elecciones, en el que los Bassi perdieron el poder.