Nacional, Wednesday 17 de January de 2018

La Justicia Federal de La Plata investiga la misteriosa muerte de un joven marino dentro de la Escuela Naval Militar Río Santiago, en Ensenada, cuyo cuerpo fue encontrado ayer al mediodía, confirmaron fuentes judiciales y policiales.

La víctima fue oficialmente identificada como Eduardo Nicolás Molini, quien era cabo segundo y fue hallado fallecido dentro de un galpón de la escuela situada en la calle 6 y camino a embarcadero, alrededor de la 1 de la tarde.

Por lo que figura en el reporte al que accedió este diario, el cuerpo fue descubierto por personal del predio, publica el diario El Día.

“Estaba colgado del cuello por una cuerda atada a una viga”, describió una fuente oficial, pero el dato llamativo es que “tenía enredada la misma cuerda en sus manos, por la espalda”.

Aparentemente se comunicó la novedad a la justicia federal de La Plata, que declinó competencia y le dio intervención a la fiscalía de Instrucción en turno, a cargo de Marcelo Romero.

Desde este ámbito dispusieron que acudieran a la escena el gabinete de Homicidios de la DDI y los peritos de Policía Científica. Para entonces, los médicos de la Escuela ya habían certificado el fallecimiento de la víctima.

En esa primera instancia se resolvió entonces que en la comisaría Primera de Ensenada se abriera una causa por “averiguación de causales de muerte”, por lo menos hasta que la autopsia que se hará en las próximas horas  determine las circunstancias y causas del fallecimiento, dijo un investigador.

“La hipótesis más fuerte es que se trató de un suicidio, pero hay algunos detalles que requieren un análisis más cuidadoso”, reconoció.

Horas después del hallazgo del cuerpo, el juez de Garantías en turno, Pablo Raele, “declinó competencia en la Justicia Federal por corresponder jurisdicción”, por lo que la causa finalmente recayó en el Juzgado Federal 3, trascendió de fuentes oficiales.

Así las cosas, se designó para la instrucción a la Prefectura Naval Argentina, con el respaldo de Policía Científica de Seguridad para el relevamiento de la escena del hecho.

Los voceros consultados manejaron la información con absoluto hermetismo, por lo que no trascendieron otros detalles sobre la víctima y las circunstancias en las que encontraron el cuerpo.

Ninguno quiso comentar, por ejemplo, si hallaron alguna nota o carta del fallecido, ni tampoco su edad o lugar de origen.