Internacional, Sunday 20 de May de 2018

Es una de las más caras de la historia. El presupuesto más importante se destinó a la seguridad de los novios e invitados.

 

De 28.000 canapés a 17.000 copas de champagne. La boda real entre el príncipe Harry y la actriz Meghan Markle esta marcada por el lujo y los detalles exquisitos. El evento, que atrae la atención del planeta, tuvo un costo de 36,5 millones de euros cuyo presupuesto más importante se destinó a la seguridad de los novios e invitados.

Lo cierto es que la boda es una de las más caras de la historia, y el motivo principal de este abultado presupuesto es el enorme dispositivo de seguridad desplegado por la corona británica cuyo costo ronda los 34,3 millones de euros. Incluye francotiradores ubicados en cada azotea, policías encubiertos por las calles y la tecnología militar "destructor de drones" por un valor de 1,1 millón de euros.

Luego de la ceremonia en la capilla de San Jorge, en el castillo de Windsor, se llevó a cabo la recepción de los invitados que tuvo un costo de casi 500 mil euros. La misma se llevó a cabo en el St. George's Great Hall, dentro del propio castillo, e incluyó la colocación de carpas y baños portátiles para los invitados.

La boda debe presentar un menú acorde a la realeza. Por eso es que el catering se dividió entre la comida de recepción y la cena para familia y amigos. Los invitados disfrutarán de un banquete compuesto por 28.000 canapés, 17.000 copas de champán y vino y un pastel de plátano de 8 niveles. Cada botella de Bollinger, la marca de champán preferida de la familia real británica cuesta unos 90 euros.

Se estima que la confección del vestido de novia de Meghan Markle tuvo un valor de 228.805 euros, según publicaron diversos medios británicos. En ese presupuesto se incluyen 90.000 euros de la tela confeccionada a medida y 4.500 euros en accesorios. El vestido es de la diseñadora Clare Waight Keller, directora de la casa de moda francesa Givenchy.

Arreglos florales: 125.809 euros

Decorar con flores las carpas de la boda, el exterior de la capilla de San Jorge o el Palacio de Buckingham tuvo un costo superior a los 125.000 euros. La capilla fue adornada con peonías blancas, entre otras flores.

Fotografía y vídeos: 19.445 euros

La fotógrafa Millie Pilkington, que trabajó para la boda de los duques de Cambridge, fue la seleccionada para capturar junto a su colega Hugo Burnand cada momento de la jornada.

Pastel de bodas: 57.195 euros

La torta nupcial, que se sirvió durante la recepción de la boda, fue diseñada por la famosa repostera Claire Ptak. Se trata de un pastel de limón y saúco, para el cual se utilizaron 200 limones Amalfi, 20 kilos de mantequilla, 20 kilos de harina, 20 kilos de azúcar y 500 huevos biológicos procedentes de Suffolk (este de Inglaterra).

Música: 343.101 euros

Este segmento incluye desde los campaneros, el organista y los coros de la iglesia, hasta los músicos de la recepción, una banda y un DJ. Solo las trompetas tuvieron un valor de 102.930 euros. El Ministerio de Defensa británico ordenó la fabricación de 20 trompetas plateadas estampadas con el Escudo de Armas Real al mismo taller que hizo las trompetas de la boda de Guillermo y Kate Middleton y de los Juegos Olímpicos de Londres.

Decoración y producción: 148.688 euros

La empresa HRP Production Solutions fue seleccionada para estar a cargo de la iluminación y decoración de los lugares elegidos para la celebración de la boda real. Se encargó de la capilla, el castillo de Windsor y la carpa. También llevó el alquiler de muebles y bares, así como las pistas de baile.

Entretenimiento: 62.910 euros

Desde fuegos artificiales hasta animadores para los niños que asistan a la boda son algunos de los entretenimientos contratadas para el evento.