Nacional, Tuesday 11 de September de 2018

El Tribunal Oral Federal Nº 4 dispuso que el 30 de octubre comiencen las actuaciones. También están acusados sus 4 hijos

El próximo 30 de octubre, a las 9:30, comenzará el juicio oral por la llamada “Ruta del dinero K”, que involucra al ya detenido empresario santacruceño Lázaro Báez y otros procesados por presunto lavado de dinero proveniente de la obra pública durante el gobierno de Cristina Fernández de Kirchner.

Según informaron ayer fuentes jurídicas, la fecha fue fijada por el Tribunal Oral Federal N° 4 de Buenos Aires, integrado por los jueces Pablo Bertuzzi, Néstor Costabel y Gabriela López Iñíguez. Es el mismo que condenó al ex vicepresidente Amado Boudou por la causa de la imprenta Ciccone.

Esta situación se da apenas una semana después de que el juez federal Sebastián Casanello, que se encargó de la instrucción del caso, citase a declarar para el próximo 18 de septiembre a Cristina Kirchner, acatando una orden de la Cámara Federal porteña.

Sin embargo, aunque está acusada por la Fiscalía, la actual senadora no está procesada en este expediente, al menos por el momento, por lo que, en principio, no formará parte del juicio oral.

En la causa hay más de una veintena de personas acusadas de cometer lavado de activos por haber montado supuestamente entre 2010 y 2013 una asociación ilícita con sociedades y cuentas bancarias en el exterior que permitieron el blanqueo de al menos 60 millones de dólares.

Entre los imputados se destaca la figura de Báez, en prisión preventiva desde 2016 y acusado de blanquear millonarias sumas de dinero provenientes de obra pública en la provincia Santa Cruz, que fue adjudicada a sus empresas de construcción.

Junto con el ex empresario serán también juzgados sus cuatro hijos: Martín, Leandro, Luciana y Melina Báez. Además están acusados en la causa el platense Leonardo Fariña, Federico Elaskar, Jorge Chueco y su hijo Sebastián, y el empresario Carlos Molinario, entre otros.

En total hay 25 imputados. Se los acusa por lavado de activos entre 2010 y 2013.

Hay citados hasta el momento 91 testigos.

Según la Justicia, el empresario, dueño del grupo Austral Construcciones y cercano al fallecido ex presidente Néstor Kirchner, fue el encargado de “brindar el entramado societario” para captar fondos públicos y “vehiculizarlos” parcialmente a las manos “de quienes entonces eran funcionarios públicos”, en referencia a la ex mandataria y otros altos cargos.

El caso se inició en 2013, aunque dio un giro en marzo de 2016 cuando un canal de televisión difundió imágenes que mostraban a Martín Báez, hijo del contratista, contando grandes sumas de dinero en las oficinas de una financiera en Buenos Aires. Esto derivó en la orden de detener al empresario, quien fue procesado poco después junto a su hijo y los otros presuntos implicados en la trama.

En el juicio se tendrá que analizar la figura de arrepentido de Fariña –quien se encuentra bajo el régimen del programa de protección de testigos e imputados- y se le rebaja la pena, en caso de ser condenado, por el aporte que hizo en la causa.

 

Los hechos que se analizarán en el juicio son los 5.100.000 dólares con los que Pérez Gadín, Martín Báez -hijo de Lázaro- y otros acusados fueron grabados en la financiera S.G.I., de Federico Elaskar, y la maniobra por la cual se sacaron del país y reingresaron 32.800.000 de dólares en títulos de la deuda pública a la empresa “Austral Construcciones”, de Lázaro Báez.

También se juzgará la compra de un campo en Mendoza y de un departamento en la Avenida del Libertador, de autos –Porsche, Mini Cooper, Ferrari, BMW, Audi- y del pago de la fiesta de casamiento del arrepentido Fariña y la modelo Karina Jelinek, entre otras maniobras.