Participaron trabajadores de prensa de diferentes medios locales y el periodista Carlos Gómez Muñoz, de reconocido prestigio y gran trayectoria, tuvo a su cargo las palabras de acción de gracias.

La misa se celebró en la Solemnidad del Sagrado Corazón de Jesús y esa línea el padre Juan Carlos Mendoza, animó a los presentes a “tener un corazón sacerdotal como el del Señor Jesús”.

“Hermanos, hoy damos gracias a Dios, por esta hermosa vocación que Dios ha dado a nuestros hermanos periodistas, es una hermosa tarea, en este mundo tan convulsionado, donde hay guerras y tempestades” destacó.

Más adelante, relaciona el Sermón de la Montaña que pronunció Jesús y de la cual se inspiró para pronunciar la Bienaventuranza del Periodista: “Bienaventurados los periodistas que escuchan a Dios y, bienaventurados los periodistas que informan con la verdad”.

“Bienaventurados los periodistas, porque muchas veces, porque al abrazar la verdad son calumniados, perseguidos e injuriados. Bienaventurados los periodistas, porque cumplen la misión de anunciar y de denunciar” afirmó.

Continúo rezando “Bienaventurados los periodistas que no se dejan sobornar. Bienaventurados los periodistas, que buscan solamente la verdad, bienaventurados los que no trazan y no se dejan coaccionar y se siente libres. Bienaventurados los que tienen coraje ante las adversidades, las persecuciones y las amenazas. Bienaventurados los periodistas que buscan a Dios”.

“El corazón de Jesús es un corazón muy bondadoso, lleno de amor y de infinita misericordia. Pidamos tener el corazón de Jesús, manso, prudente y de infinita misericordia” alentó.

El padre Juan Carlos Mendoza transmitió el saludo del obispo diocesano, monseñor Adolfo Canecin que estaba acompañando las celebraciones patronales en la comunidad del Sagrado Corazon de Jesús en la ciudad de Santa Lucia.

El obispo de Goya, monseñor Adolfo Canecín, expresó su cercanía con todos los trabajadores de prensa, dando gracias a Dios por los dones y talentos “puestos al servicio del bien común” en la importante misión de mantener informada a la comunidad.

En esta celebración “damos gracias a Dios por ese talento que ustedes recibieron y lo supieron cultivar profesionalmente; no lo escondieron, sino que lo pusieron al servicio de la Iglesia, la sociedad y al servicio de la humanidad”, destacó.

Sobre el final del mensaje expresó: “¡Gracias por poner sus vidas, su tiempo y su talento al servicio del bien común!”. Al impartir su bendición sobre cada uno de los periodistas y sus familias expresó: “Pido a Dios que bendiga a todos y a cada uno de ustedes, que les retribuya el ciento por uno, por su entrega y por su servicio”. –