Surgen a partir de las publicaciones de búsquedas.
Engaños, fotos con inteligencia artificial y viajes repentinos.
¿Quién no haría cualquier cosa por encontrar a su mascota perdida? Los estafadores digitales lo saben. “Ellos, listos para sacarte plata con la excusa de ayudarte a contrarreloj”, posteó Victoria en sus redes sociales. Le sacaron plata y todavía no encuentra al Cuchu. Como ella, decenas de dueños de mascotas fueron perjudicados.
Para Victoria y Daniel todo empezó cuando El Cuchu, que forma parte de la familia hace poco más de un año, se perdió hace más de quince días. Hicieron publicaciones en redes y pegaron carteles en postes de Villa Devoto. Cuentan que el Cuchu solía irse por la terraza del PH donde viven y pasar un tiempo en la del vecino. Pero siempre volvía e incluso era "el primero que respondía el llamado para desayunar, almorzar o cenar".
En los posteos pusieron una foto, los datos de contacto y aclararon que el gato tenía chapita y está castrado. Hace unos días recibieron una respuesta por Facebook de alguien que vio al Cuchu en una publicación: el gato había sido rescatado por una persona que solo se podía contactar por Facebook.
"Tenemos este gato macho, lo trajo una familiar mía de la localidad de Villa Devoto, ella andaba de paso por la zona y cuando pasaba por la calle Simbrón al 4100 lo atropelló con el auto. Tenía un collar y la argolla. Lo publico con el nombre de la calle y la altura por si era de algún vecino de la zona, de momento, necesito un tránsito para él, no lo podemos tener por nuestros perros, por favor compartan". Ese era el mensaje de la publicación -en realidad, de la foto de un monitor con la publicación- con la imagen de un gato igual al Cuchu en brazos de alguien.
“Borran la publicación rápido para que quede captura. Lo hacen adrede para que la foto se distorsione y no se note que es IA” explica Micaela, que vivió una situación casi idéntica. "Nosotros estábamos muy angustiados y en un primer momento no reparamos en los detalles de la foto", dice Victoria. "Juegan con el tiempo, saben de donde estás, tienen todo estudiado", agrega.
La primera rareza apareció cuando Victoria se comunicó con Mayra. "No acepto solicitudes de amistad", le dijo, pero conversaron. Le dijo que el gato estaba perfecto, a pesar del choque, que compartieron el anuncio y que como nadie apareció reclamándolo, lo borraron y lo dieron en adopción a otra persona. Entonces, le pasaron el contacto de Romina, con una foto de perfil de dos mujeres jóvenes. Cuando Romina respondió, era evidente que era alguien de mucha edad.
Romina le dijo que con gusto lo devolvería, pero que estaba a punto de viajar a Colón, Entre Ríos y podía dejar al gato en Luján o bien, a Mayra, que lo había tenido antes. Mayra, que nunca aceptó la solicitud de amistad ni quiso proporcionar una dirección exacta, pidió dinero para su traslado. Argumentando una deuda en mercadopago, proporcionó el alias de su "remisería de confianza" para pagar los $ 28.700 supuestamente costaba el traslado.
Después de muchas das y vueltas, Romina dijo que se fue de viaje y dejó al gato en una garita en Los Pinos, para que Mayra lo buscara. La historia parecía de telenovela: que si la garita estaba en el cementerio, que Mayra no tenía el teléfono de Romina, que iba a necesitar otro remís... Cuando Victoria pidió otra foto y dijo que ella iba a buscarlo, le dejaron de contestar y la bloquearon.
A través de grupos de Facebook, Victoria se puso en contacto con otras víctimas de la estafa y descubrió que siempre operan de la misma forma. "Te dicen que lo tienen en un lugar de la Provincia, pero que tienen que iniciar un viaje. Que lo van a dejar al cuidado de otra persona que te lo va a entregar, pero que para eso tienen que tomar un remís, y que necesitan plata. Entonces te pasan un alias de Mercado Pago para que le transfieras plata", resume Victoria.
En su caso, las alarmas se encendieron en ese momento. Pero a otras personas les pidieron hacer una videollamada, con la excusa de mostrarles el animal, y ahí les hackearon la cuenta de whatsapp. "Hacés la publicación de tu gato y cruzas los dedos para que aparezca. Hay gente muy solidaria, que te ayuda y te da consejos, y también esta gente infiltrada que diseña estas modalidades de estafa", dice.
En Facebook se multiplican los casos similares. Los montos de las estafas varían, pero los peores son aquellos a quienes les sustraen las cuentas de whatsapp y sumas mayores. Aunque la búsqueda de una mascota pueda ser desesperante, es fundamental tomar precauciones:
SC Fuente: Clarin