Agradecida, la Diócesis de Goya despidió a las Hermanas Siervas de María de Anglet El obispo de Goya, monseñor Adolfo Ramón Canecin, presidió una misa en ocasión de la despedida de las hermanas Siervas de María de Anglet, que dejan la diócesis.
En su homilía, deseó que continuar anunciando la “Buena Nueva del Evangelio allí donde sean destinadas, con el entusiasmo y la fidelidad que las caracterizan” y animó a los fieles a "contagiar a nuestros jóvenes una cultura vocacional, sobre todo en las pastorales orgánicas".
En su homilía, el prelado invitó a los fieles a "celebrar la bondad de Dios, que a lo largo de estos 32, años ha regalado a la diócesis de Goya, la presencia de las hermanas de las Hermanas Siervas de María de Anglet, que cumplieron una importante misión pastoral en jurisdicción de la Parroquia San José Obrero” en la ciudad de Goya y con la Fundación María de Belén.
"Como diócesis queremos tener memoria agradecida, no sólo mirando estos 32 años de su presencia en Goya”, sino también “reconocemos su hermosa trayectoria y generosa tarea, por estas tierras correntinas” al tiempo que reconoció “los desafíos de la Congregación”.
Las Hermanas Siervas de María de Anglet “supieron vivir de modo silencioso, humilde y con mucha fidelidad” porque “han sabido mantener encendida la lámpara de la fe y de la caridad” y las animo a que continuar anunciando la “Buena Nueva del Evangelio allí donde sean destinadas”.
El obispo recordó que llegó a la Diócesis de Goya, hace 10 años, y desde el primer momento de su ministerio episcopal demostró fundamental "contagiar a nuestros jóvenes una cultura vocacional, sobre todo en las pastorales orgánicas".
Ánimo a crear en las familias, en las comunidades parroquiales, “ambientes propicios”, donde fuese posible “escuchar la llamada del Señor” y promover las vocaciones a la vida consagrada, religiosa o sacerdotal, teniendo en cuenta que estas hermanas dejan una “huella trascendente” en la vida diocesana.
Monseñor Adolfo Canecin, recordó a la Hermana Nidia Domínguez (recientemente fallecida) y a la hermana Graciela Marcón, quienes fueron fundadoras de la comunidad en Goya, cuando era obispo de esta Diócesis de Goya monseñor Luis Teodorico Stockler.
Asimismo, estuvieron en Goya las hermanas: Adela González (Uruguay), Alicia Antón, Cristina Ciarrochi, Ramona Cardozo y María Noëlle Sagou (África).-