Un sacerdote de Salta de 42 años fue condenado a tres años de prisión condicional por resultar autor del delito de abuso sexual simple agravado por ser cometido por un ministro de culto.
Un sacerdote de Salta de 42 años fue condenado a tres años de prisión condicional por resultar autor del delito de abuso sexual simple agravado por ser cometido por un ministro de culto. Fue denunciado por la madre de la menor damnificada. La mujer refirió que su hija de 11 años concurría a la parroquia donde oficiaba misas el sacerdote porque formaba parte del grupo de monaguillos. Después del primer encuentro que tuvieron con el cura pospandemia, la menor regresó a su casa muy angustiada y le contó a su mamá que el acusado la había sometido a tocamientos impúdicos.
La audiencia de debate se llevó a cabo en la Sala VI del Tribunal de Juicio, presidida por el juez José Luis Riera.
El imputado permanecerá en libertad por la modalidad de la condena dictada y deberá cumplir las obligaciones fijadas por el juez durante tres años. Entre ellas, abstenerse de acercarse a la víctima y a su grupo familiar a menos de 300 metros; someterse a tratamiento psicológico previo diagnóstico de un profesional.
En el mismo fallo, el sacerdote resultó absuelto de abuso sexual simple agravado en otro hecho, por aplicación del principio de la duda.