El hecho ocurrió en el marco del aniversario de la primera marcha de Ni Una Menos, cuando Danielo, quien había cumplido su último turno policial un día antes, irrumpió armado en un gimnasio donde se encontraba su ex pareja, Anabella Viviana Florentín, junto a su actual compañera, Marcela Fabiana Heredia.

La relación entre Danielo y Florentín había finalizado hacía dos años, pero según informaron fuentes cercanas, desde entonces ella había sido víctima de hostigamiento constante por parte del oficial. La situación escaló esta semana, cuando Florentín formalizó una denuncia por violencia de género.

Al enterarse de la denuncia, Danielo se presentó en el gimnasio donde entrenaban ambas mujeres. Heredia intentó impedirle el ingreso, momento en el que el oficial extrajo su arma reglamentaria y le disparó dos veces. La mujer falleció en el lugar de forma instantánea.

Tras cometer el crimen, Danielo se atrincheró en el local junto a su ex pareja, negándose a entregarse y amenazando con quitarse la vida. El tenso encierro se prolongó por más de diez horas, hasta que el Grupo Halcón intervino y logró ingresar al establecimiento. Allí hallaron al agresor gravemente herido. Fue trasladado de urgencia al hospital de Moreno, donde murió durante la operación.

El caso conmociona a la opinión pública y reaviva el reclamo por una justicia con perspectiva de género, al tiempo que pone en cuestión los mecanismos de control dentro de las fuerzas de seguridad. La investigación está en curso para esclarecer todos los detalles del caso y determinar si hubo fallas institucionales en la protección de las víctimas.